UNA ACEITUNA
UNA ACEITUNA
—¡Dios, mira esa aceituna! —Dijo Lucas
señalando al cielo.
—¿Donde, donde?
—¡Dios mío! Solo puedo ver la
aceituna. ¿Enserio no la ves? Acércate, anda.
—A ver, un momento —dijo Juanito mientras colocaba la cabeza al lado del brazo de Lucas.
Justamente, la aceituna cayó de la
rama. El cuerpo de Juanito se desplomó entre aquellos olivos. No lo vio venir.
—¡Dios, mira esa aceituna! —Dijo Lucas
señalando al cielo.
—¿Donde, donde?
—¡Dios mío! Solo puedo ver la
aceituna. ¿Enserio no la ves? Acércate, anda.
—A ver, un momento —dijo Juanito mientras colocaba la cabeza al lado del brazo de Lucas.
Justamente, la aceituna cayó de la
rama. El cuerpo de Juanito se desplomó entre aquellos olivos. No lo vio venir.
Quedé impactado.
ResponderEliminar¡MUY BUENO!
Shalom amigazo
Muchas gracias. Te mando un saludo y, Shalom.
Eliminar